Yo
soy un francotirador que respeta las ideas ajenas… siempre y cuando sean ideas.
Me
gusta apuntar mis RIFLEXIONES a blancos en movimiento: la derecha torcida, la
izquierda chic que manda a comer mierda al resto; la academia (FLACSO y ANDINA)
que forma analistas políticos empacados al vacío, igual que los embutidos…
Para
sacarme este prejuicio miro la televisión sin audio: así, no oigo ficciones; miro
las facciones: el lenguaje del cuerpo no miente.
Sin
audio compruebo que Osvaldo Hurtado luce vehemente pero no convincente… Es obra de su pinta: cuatro pelos tinturados
dan vuelta al ruedo, como un torero, por su calva. Antes era el iceberg que
habla.
La
presidenta del Congreso, sin su fluida voz, luce guapa y gana mucho. Con audio,
doña Gabriela pierde: es una niña que juega a la piñata. Con un palo y con los
ojos vendados, busca romper la olla encantada para recoger conceptos… Pero no
da una: palazo por aquí, palazo por acá…
Guillermo
Lasso es, en vivo, una especie de vídeo mal grabado. Borroso y aburrido, adormece
con su voz nasalizada. En cambio sin audio y a modo de cine mudo, le surge el
carisma. Lasso divierte, conmueve.
Jaime
Nebot cuando habla es ruidoso, tajante. Sin audio su imagen de Tintán se mezcla
con la del eterno candidato. Es una especie de pipi room: tiene una orina de
primera (ven te meo) que no vale desperdiciarla en un país de tercera.
Con
audio o sin audio Alvarito luce como
un actor descompasado que persigue a tiros de disparates (sus manos además se
mueven sin rumbo) las ideas en desbandada de Abdalá Bucaram, su primer
protector.
Lucio
Gutiérrez me entristece. Con audio no solo es vacío de ideas: hace salivar a
los ingenieros genéticos que retocan el ADN. Sin audio, la nariz y cachetes
hacen delirar a los caricaturistas.
Sin
audio Freddy Ehlers luce tal cual es: un vago, mente en blanco, que abraza a
árboles. Con audio, en cambio, demuestra que la fuga de cerebros no
necesariamente se produce cuando se sale de la Universidad, sino antes: antes
de nacer.
Carlos
Vera, sin audio, es el Che Guevara de Madera de Guerrero. Con audio es el
CHEPULIN COLORADO de la derecha que quiere salvarnos. Pobre Che. Pobre derecha.
Labioso hasta dejar sin aire a todos.
Varios
ministros de Estado demuestran, con audio, algo grave: no solo en la Asamblea Nacional
hay que poner alcantarillas en vez de micrófonos. También hay que poner
alcantarillas en las sesiones de gabinete.
Cuando
aparece en la pantalla Rafael Correa, yo apago asustado la
TV. Se entiende. No quiero caer en la tentación de descalificarlo. Me espantan
los grilletes de la Ley de Comunicación.
Haga
usted la prueba para divertirse. Retire el audio en la Tele. Muchos líderes terminan
en condición de dibujo animado.