En la página WEB de La Posada del Pensamiento Borges se lee lo que sigue:
atricio Falconí Almeida (PATRICIO FAL) muestra el BREVE FALCONIUS ILUSTRADO
Patricio Falconí Almeida (FAL) tiene un sus manos un ejemplar de su libro BREVE FALCONIUS ILUSTRADO. El libro fue muy comentado y celebrado por el humor corrosivo y directo. FAL dice:
-Ese libro fue, para mí, como sentarme en el inodoro: un alivio. Yo tenía que evacuar toda la política descompuesta que había ingerido y respirado durante largos años.
Luego, agrega:
- El libro tenía un objetivo: provocar enojos y risas en el lector, antes de que el lector coloque el producto final, que es la clase política tramposa, en el lugar adecuado. Luego hay que tirar el agua, nada más.
Patricio Falconí Almeida no entiende el cinismo de los candidatos y gobernantes que adulan y cultivan la inmadurez del pueblo. Fea y grave cosa. Advierte con serieddad:
-Todavía no se entiende que el mayor capital de un país no es la geografía, ni el clima, ni el petróleo, ni el oro, ni las variables culturales o religiosas. El mayor capital de un país es la madurez de su gente. Esta idea la repite una y otra vez el maestro y presidente de Uruguay Pepe Mujica. Esta idea la fundamentan, con erudición, a plenitud, los tratadistas estadounidenses Daron Acemoglu y James A. Robinson en su libro POR QUÉ FRACASAN LOS PAÍSES.
La madurez es un talento que se contagia: evita el caudillismo. Evita al mesías que busca la salvación por su obra y no la solución institucional y democrática, progresiva.
El humor limpia por dentro y ayuda a madurar y pensar.
http://wikiborges.wordpress.com/wp-admin/post.php?post=329&action=edit&message=6&postpost=v2
-Ese libro fue, para mí, como sentarme en el inodoro: un alivio. Yo tenía que evacuar toda la política descompuesta que había ingerido y respirado durante largos años.
Luego, agrega:
- El libro tenía un objetivo: provocar enojos y risas en el lector, antes de que el lector coloque el producto final, que es la clase política tramposa, en el lugar adecuado. Luego hay que tirar el agua, nada más.
Patricio Falconí Almeida no entiende el cinismo de los candidatos y gobernantes que adulan y cultivan la inmadurez del pueblo. Fea y grave cosa. Advierte con serieddad:
-Todavía no se entiende que el mayor capital de un país no es la geografía, ni el clima, ni el petróleo, ni el oro, ni las variables culturales o religiosas. El mayor capital de un país es la madurez de su gente. Esta idea la repite una y otra vez el maestro y presidente de Uruguay Pepe Mujica. Esta idea la fundamentan, con erudición, a plenitud, los tratadistas estadounidenses Daron Acemoglu y James A. Robinson en su libro POR QUÉ FRACASAN LOS PAÍSES.
La madurez es un talento que se contagia: evita el caudillismo. Evita al mesías que busca la salvación por su obra y no la solución institucional y democrática, progresiva.
El humor limpia por dentro y ayuda a madurar y pensar.
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